lunes, 31 de enero de 2011

Sombra, otra adorable gatita negra muy querida

Amanda nos habla de su adorada gatita negra, Sombra. Cada vez somos más los que nos dejamos conquistar por estos felinos negros tan elegantes. Sus palabras:

Sombra tiene poco más de un añito. Sombra llegó a mi vida y a la de mi novio a través de la red social Tuenti. Un buen día recibí un evento con la foto de tres preciosas bolitas de pelo negro, a las que sus dueños iban a ahogar en un cubo de agua porque no querían hacerse cargo de ellos. Cuando vi la imagen de esas cositas pequeñas, completamente negras y con unos grandísimos ojos azules, no lo pude resistir, y pese a saber que en mi casa no sería bien recibido, me lancé y le dije a la chica del anuncio que me reservara un macho. Fuimos hasta Loranca en metro, tardamos un montón, y allí estaba la chica, con tres cajas de zapatos y un gatito en cada una. El único macho que quedaba ya estaba reservado, así que tuve que elegir entre dos gatitas: una, timida y calladita, y la otra una cabra loca que no paraba de saltar, maullar y moverse por la caja. Obviamente, cogí al terremoto gatuno xD, y tras un largo viaje de regreso a casa en el que Sombra flipó en el metro, formó parte de nuestras vidas hasta el punto de que no podríamos vivir sin ella.

Ella hace que todo sea diferente. Por las mañanas, cuando me quedo dormida, ella me despierta; cuando lloro, ella lame mis lágrimas; cuando estoy triste, se pone a mi lado y me hace arrumacos, y cuando duermo... no para de dar la lata xD. Pero no importa, porque sé que nuestras vidas no serían las mismas si ella no estuviera.


Y aquí las fotos de Sombra, su preciosa gatita negra:



¡Gracias por quererla tanto, Amanda! :-) ¡Es realmente una hermosura!

jueves, 13 de enero de 2011

Susto, el hermanito de Sorpresa

Este es Susto, que sigue en la calle. Como veis, ya se deja acariciar de maravilla. Aún es un poco asustadizo, pero en una casa eso se le pasaría pronto. Es una ricura. Fotos decentes aún no hemos podido sacarle, pero todo se andará.


domingo, 9 de enero de 2011

Historia de "Trece"

Nos escribe Carmen para contarnos de su preciosísima gatita negra "Trece". Basta que veáis las fotos para que os deis cuenta de que es de una belleza sin igual. ¡Qué afortunada eres de tenerla, Carmen! :-)

Os quiero presentar a Trece, una gatita que conseguimos a través de un anuncio en internet. Cuando llegamos a recogerla era una pequeña bolita de pelo (tiene algo de persa, y no lo sabíamos) y enseguida se hizo con nuestro corazón.

Dentro de poco cumplirá ya un año, y está hecha un trasto, y se apropia de cualquier cosa en cualquier momento, todo vale para jugar, y todo sitio es bueno para una buena siesta.

A veces es un poco bipolar, pero es parte de su encanto.

Te mando un par de fotos de cómo ha ido evolucionando. Son de diferentes lugares porque no la dejamos sola en casa ni un solo fin de semana.






Sorpresa y las navidades

Durante las vacaciones de Navidad, Emilio y yo nos fuimos unos días a Asturias y dejamos a los gatitos al cuidado de mis suegros, que venían a diario a ponerles comida y agua y limpiarles las bandejas. Fueron ocho días de ausencia en los que los gatos camparon a sus anchas por la casa, aunque seguro que nos echaron un poquito de menos. Así nos dijeron adiós Yin y Yang:



Al volver, Yin y Yang estaban como siempre. Pero Sorpresa, recién sacado de la calle y habiendo pasado varios días sin nosotros, volvió a asilvestrarse un poco, y nos quedamos perplejos al ver que huía de nosotros y no nos quería ni ver. Seguía a Yin a todas partes, parecía su sombra, y ronroneaba cuando él estaba cerca. Pero si Yin venía a nosotros, él se mantenía a distancia.

Le reconquistamos cogiéndolo un poco a su pesar, dándole caricias y, sobre todo, ¡comida! Tardó tres días en volver a ser el mismo, y espero que, ahora que ya vamos a estar continuamente con él, no vuelva a las andadas. Si lo damos en adopción, imagino que tardará unos días en acostumbrarse a sus nuevos dueños, pero con un poco de cariño y ¡comida! (jajaja) será coser y cantar.

Me sigue dando mucha pena su hermanito Susto. Ese sí que no nos cogió miedo. Sigue en la calle, y quizá esos días pasó un poco de hambre, porque cuando volvimos estaba más cariñoso que nunca y ahora se deja acariciar tanto como un gato casero. Sólo espero que al resto de la gente le tenga aún miedo, porque como se acerque a todo el mundo, su vida peligra. Me muero por traérmelo a casa, o por que aparezca alguien que pueda acogerlo, pero de momento no ha sido posible ni una cosa ni la otra.

Sorpresa sigue buscando hogar, pero entretanto se pega a Yin a todas horas. Se apaña hasta para dormir con él en una cestita individual, y Yin encantado. Le lame y le lame, parecen padre e hijo.


Ayer una chica se interesó por Sorpresa, pero no tenía más gatos y Sorpresa necesita compañía felina. Ha vivido toda su vida acompañado de gatos y ahora ya no sería feliz de otro modo.

Por su parte, Yang sigue detrás del portátil, que se está calentito y tal.


Es adorable. Se lleva muy bien con Sorpresa, pero no tan bien como Yin. Yin es un trasto, pero con los gatos es un amor. Yang es más bien lo contrario. :)

A ver si hay suerte y Susto sale prontito de la calle. Crucemos los dedos.