domingo, 9 de enero de 2011

Sorpresa y las navidades

Durante las vacaciones de Navidad, Emilio y yo nos fuimos unos días a Asturias y dejamos a los gatitos al cuidado de mis suegros, que venían a diario a ponerles comida y agua y limpiarles las bandejas. Fueron ocho días de ausencia en los que los gatos camparon a sus anchas por la casa, aunque seguro que nos echaron un poquito de menos. Así nos dijeron adiós Yin y Yang:



Al volver, Yin y Yang estaban como siempre. Pero Sorpresa, recién sacado de la calle y habiendo pasado varios días sin nosotros, volvió a asilvestrarse un poco, y nos quedamos perplejos al ver que huía de nosotros y no nos quería ni ver. Seguía a Yin a todas partes, parecía su sombra, y ronroneaba cuando él estaba cerca. Pero si Yin venía a nosotros, él se mantenía a distancia.

Le reconquistamos cogiéndolo un poco a su pesar, dándole caricias y, sobre todo, ¡comida! Tardó tres días en volver a ser el mismo, y espero que, ahora que ya vamos a estar continuamente con él, no vuelva a las andadas. Si lo damos en adopción, imagino que tardará unos días en acostumbrarse a sus nuevos dueños, pero con un poco de cariño y ¡comida! (jajaja) será coser y cantar.

Me sigue dando mucha pena su hermanito Susto. Ese sí que no nos cogió miedo. Sigue en la calle, y quizá esos días pasó un poco de hambre, porque cuando volvimos estaba más cariñoso que nunca y ahora se deja acariciar tanto como un gato casero. Sólo espero que al resto de la gente le tenga aún miedo, porque como se acerque a todo el mundo, su vida peligra. Me muero por traérmelo a casa, o por que aparezca alguien que pueda acogerlo, pero de momento no ha sido posible ni una cosa ni la otra.

Sorpresa sigue buscando hogar, pero entretanto se pega a Yin a todas horas. Se apaña hasta para dormir con él en una cestita individual, y Yin encantado. Le lame y le lame, parecen padre e hijo.


Ayer una chica se interesó por Sorpresa, pero no tenía más gatos y Sorpresa necesita compañía felina. Ha vivido toda su vida acompañado de gatos y ahora ya no sería feliz de otro modo.

Por su parte, Yang sigue detrás del portátil, que se está calentito y tal.


Es adorable. Se lleva muy bien con Sorpresa, pero no tan bien como Yin. Yin es un trasto, pero con los gatos es un amor. Yang es más bien lo contrario. :)

A ver si hay suerte y Susto sale prontito de la calle. Crucemos los dedos.

10 comentarios:

  1. Es graciosa la primera foto. Aunque es duro me alegra mucho que no des en adopción a Sorpresa alegremente y tengas en cuenta sus necesidades. Yo, personalmente, creo que todo gato, sobretodo si vive en un piso, debería tener otro compañero felino. Ojalá pronto puedas enseñarnos a Yin con Susto.

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  2. Hay gatos que parece que llevan mejor lo de estar solos. Yang sería una de ellos. Pero Sorpresa está claro que necesita compañía gatuna. Y no, no lo pienso dar alegremente a cualquiera. Quiero asegurarme de que encuentra una buena familia. La única pena es que todo el tiempo que tarde en aparecer, Susto seguirá en la calle. Hasta que me canse y lo suba para mi casa a pesar de todo. :D

    ¡Gracias por la visita!

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  3. Ojalá Sorpresa sea pronto adoptado, qué lindo es. Me encanta cómo duerme al lado del negrito y se tapa la cara con las patitas. Pa comerselo!

    Besotes.
    Sara

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  4. Y si sacais unas fotitos s Susto y lo difundimos de mientras? Igual alguien se apiada de él...

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  5. Pues sí, Michis, esa es la idea. A ver si un día lo vemos de día y podemos hacerle fotos, que por la noche salen muy mal. Es un gatito todo naranjita, precioso. Ya lo he mostrado en algún post anterior sobre los callejeritos. En cuanto pueda difundo fotos. ¡Gracias! :-)

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  6. Se les ve genial!!!! Mira que venir a la tierrina y no avisar!!! para lo próxima.Un besito y feliz año.

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  7. Si subes a Susto yo lo apadrino totalmente!!!!
    (y no es broma, ya me conoces)

    ¿Y la chica esta no querría a Susto y a Sorpresa?

    ¿Se sabe algo de Pumuky?

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  8. Maite, mira que te tomo la palabra y tú tampoco es que estés muy boyante... ^^

    La chica esta no me convenció mucho de cualquier modo, porque quería el gato porque "a la hija de mi marido se le antojó un gatito, y dale con un gatito, así que nada, le daremos el gatito. ¿Puede ser hoy?". Entiendes, ¿no? :-)

    De Pumuky ni rastro, lamentablemente. Hace un par de meses ya que no la vemos. Confío en que acabe reapareciendo.

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  9. Era muy bonita, quizás alguien se la haya llevado. Ojalá esté bien y en una casa sin pasar frío. Tranquila que sabía buscarse la vida.

    Lo de Susto, ya sabes, que estos días hace mucho frío...

    Ah, ahora que dices lo de Sorpresa y la chica ésta. Al próximo que me pregunte si "tengo gatos para dar" le voy a decir que no, que ya sé de que va la cosa.

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  10. ¡A ver si hay suerte con Sorpresa y también con Susto!

    Saludetes gatunos,

    Rumbo, Noa y Elmo.

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