sábado, 7 de mayo de 2011

Tontín, día 7

"No me mires así, que igual te voy a hacer las curas"
Tontín tiene tenias. Decidlo rápido tres veces seguidas.

Este mediodía, justo cuando le intentaba dar el último cuarto de calmante (digo intentar porque me cuesta lo suyo, y eso que es un trocito de pastilla ínfimo) le he revisado la herida antes de limpiársela con eqmina y gasas, y he visto el bucólico cuadro de un gusano como de un centímetro cayendo hacia la herida y de otro de dos y medio asomado en el recto. Un gusano blanco y ondulante. Perfecto para la hora de la comida, mmm.

He ido a toda prisa a por la gasa y la eqmina (un betadine para gatos, bueno, inicialmente para caballos pero que sirve para otros muchos animales) y, al volver, ya no estaban ninguno de los dos (probablemente Tontín se los haya vuelto a comer o, en alguno de los intentos de huida para que no le diera la pastilla, los perdió por el camino, o se le reintrodujeron en el ano y estaban intentando entrar en vez de salir). La mantita azul que me prestaron en la veterinaria tenía como tres o cuatro granitos de arroz (al ser la manta azul, destacaban muchísimo; con una de nuestras mantas naranja, no me habría dado cuenta). Aproveché que aún no habían cerrado la clínica para preguntar qué hacía, y me dieron luz verde para darle la pastilla antiparásitos (sólo le pusimos la pipeta antes de la operación para no abusar de químicos en su cuerpo e íbamos a esperar hasta el lunes para la pastilla) y me han dicho que en principio no hay nada de lo que preocuparse con respecto a que estén cerca de la herida.

Después de 15 minutos de googlear (en inglés, porque buscando "tenia gato" en castellano aparecen miles de entradas en los que han escrito mal "tenía gato", algo muy común) ya me hecho una composición bastante clara del asunto de las tenias, un parásito que vive en el intestino de ciertos animales y que en el caso de los gatos, requiere de que éste se haya comido previamente una pulga que a su vez se hubiera alimentado de huevos de tenia. Luego va soltando "eslabones" de su cuerpo que son como granos amarillos de arroz que van cargados de huevos, que al salir del culo del animal cerrarán el ciclo de la infección. Vamos, que la buena noticia es que los huevos que haya podido dejar por ahí (aunque he limpiado a conciencia, sobre todo el pelaje del gato y la zona perianal, y seguiré haciéndolo hasta que no quede rastro) al parecer no les contagian si son comidos directamente (en resumen, necesitan de la protección del cuerpo de la pulga para superar el ácido estomacal), pero la mala noticia es que podría tener pulgas, aunque no las hemos detectado ni los excrementos oscuros que suelen dejar. Quizá fuera antes de llegar de la veterinaria de Valencia a casa de su acogida, perdiéndolas cuando lo bañaron por haberle dejado demasiado tiempo en la veterinaria dentro del transportín y devolvérselo, hablando en plata, bañado en sus propios excrementos.

Así que le he dado la otra pastilla (ésta vez ya voy cogiendo el truco de ponerlo panza arriba, hacer que abra la boca y dejarle caer la pastilla directamente en su garganta) y hacia el viernes me comentó el veterinario que habrá que repetir para asegurarse.

Justamente esta mañana había dejado pasar a Yin y a Yang un poquito para que fueran haciéndose al olor de Tontín. Supongo y espero que no les pasará nada por lo ya comentado y porque anteayer les puse la pipeta a todos y ayer ellos se tomaron la pastilla. Pero para la próxima, tomo nota de que no es buena idea romper la cuarentena con un gato callejero.

Aparte de eso, Tontín está muy bien. La herida está perfectamente cerrada, ni siquiera mancha apenas la gasa al limpiarle, y él está muy tranquilo como siempre (por cierto, las tenias no son a priori muy perjudiciales para ellos, pero puede ocasionar letargo, depresión, irascibilidad, irritabilidad de colon y, en casos extremos, delgadez y anemia). A pesar de las tropelerías que me ha tocado hacerle para darle las pastillas y hacerle las curas, él se sigue arrimando una y otra vez y hasta me enseña la tripita cuando llevo un rato acariciándole y de repente dejo de hacerlo por alguna razón, animándome a que siga.

Es un amorzote, estoy deseando que puedan estar juntos. Yang sigue bufándole y a Yin le ha gruñido un poquito, pero todo se queda en palabras y todos están muy curiosos acerca de la otra parte.

3 comentarios:

  1. Cada vez que te leo me sorprende más lo super bueno que es tontin! madre mía! si se deja hacer de todo!! y la verdad es que me alegro mucho porque con las curas, las pastillas y todo, mejor que sea así de bueno...

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  2. Pobrecito... y qué asquete lo de las tenias :( Con lo asquerosa que soy yo para estas cosas... pero estoy segura que en tu misma situación tendría que hacer de tripas corazón y limpiarle todo lo mejor posible.

    Espero que vayan desapareciendo, se le ve tan buenazooo.

    Besos

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  3. Ese gato es un pedazo de pan y ademas amoroso,se ve que no tuvo malas experiencias en la calle ,o por lo menos no dejaron secuela.

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