A Esmeralda le lloran los ojitos. Hemos preguntado al veterinario si podría deberse a alguna enfermedad, pero la gatita está perfectamente sana. Ocurre que sus conductos lacrimales son estrechos y, cuando el ojo genera lágrimas, no son capaces de drenarlas, así que las lágrimas caen hacia afuera y al oxidarse provocan esa manchita marronácea bajo los ojitos.
Sucede lo mismo, por ejemplo, con los perros malteses y los gatos persas. No es nada preocupante y todo lo que hay que hacer es pasarle una gasita mojada en suero fisiológico dos o tres veces al día, para que le quede la carita más o menos limpia. Quitar la mancha completamente es difícil y no vale la pena, sobre todo porque Esme es una gatita preciosa se ponga como se ponga. Y si no, miradla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario